La exposición, reflejo palpable del legado cartográfico valenciano, contó con la presencia de Sergio Arlandis López, Director General de Cultura, quien representó a la Vicepresidencia primera y Conselleria de Cultura y Deporte en este destacado evento. Su participación enfatizó la relación intrínseca entre la cultura, la historia y la cartografía, destacando la importancia de esta disciplina en la comprensión y definición de nuestro territorio regional.
El acto de inauguración fue un despliegue exquisito resaltando la contribución insustituible de la cartografía en la configuración histórica y política de la región. La participación de nuestra delegación reafirma el compromiso del COIGT con la promoción de la ingeniería geomática y topográfica, además de su interés en fomentar la interacción y colaboración con diferentes sectores de la comunidad, incluido el cultural.
Con la presencia de personajes notables y representantes de diversas instituciones, este evento destacó la importancia de la preservación y promoción del patrimonio cartográfico. Celebramos la iniciativa de la Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu y todos los colaboradores involucrados, y nos sentimos honrados de ser partícipes en la difusión de este legado invaluable que nos conecta de manera tangible con la rica historia y tradición de nuestro territorio.
Piezas únicas y acceso gratuito
La exposición es de acceso gratuito y estará abierta al público hasta el 21 de enero de 2024 en la Sala Capitular del Monasterio de San Miguel de los Reyes. Se podrá visitar de martes a viernes, de 10.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas; y los sábados, domingos y festivos (1 de noviembre, 6 de diciembre y 8 de diciembre), de 11.00 a 14.00 horas.
La Biblioteca Valenciana ha reunido una selección de las piezas cartográficas más valiosas e interesantes pertenecientes a sus propios fondos y ofrece una ocasión única para comprobar cómo el territorio valenciano ha estado representado a lo largo de los siglos.
Entre las obras que se exponen destacan, como piezas principales, dos de los mapas más relevantes del fondo cartográfico de Biblioteca Valenciana: el Ortelius (1584), que es el primer mapa impreso del reino de Valencia; y el Tomás López (1788), considerado como el mapa con el que arranca la modernidad cartográfica en tierras valencianas.
El recorrido de la exposición guía a cada visitante en una reflexión sobre la relación entre cartografía y poder a través de diversas muestras del uso militar, religioso, social, educativo o comercial de los mapas a lo largo de nuestra historia.
Para ello, se divide en diversas secciones: 'Mapas y educación', con mapas escolares y atlas que muestran la importancia de la geografía en la cultura de masas; por su parte, la sección 'Mapas y guerra' ofrece un análisis de las relaciones entre las campañas militares, asedios y batallas y la producción cartográfica.
El apartado 'Mapas y poder' cuenta con ejemplos gráficos que ayudan a entender el papel que desempeñaron las provincias en la constitución del estado liberal del XIX como nuevo instrumento administrativo y político, además de exhibir diversos mapas relacionados con el gobierno eclesiástico, como el del Arzobispado de València de 1760.
Asimismo, en la sección 'Valencia en la producción europea de cartografía' se pueden contemplar excelentes ejemplos de mapas de Valencia elaborados por las escuelas de cartografía flamenca y francesa.
En concreto, cabe destacar los mapas de Ortelius (1584), Hondius (1606), Mercator (1620), Jansonius (1628) o Blaeu (1644), de las escuelas de Ámsterdam y Amberes. De la escuela francesa (siglo XVIII), hay que destacar el mapa de Tomás López (1788), inspirado en el racionalismo ilustrado francés, y en que el territorio valenciano se presenta con una orientación norte-sur como parte de la Península Ibérica.
La muestra cuenta también con un apartado con el que se conmemora el 300 aniversario de la muerte del padre Tosca, en el que se podrá admirar, a partir del mes de noviembre, un ejemplar del plano de la ciudad de València, datado en 1736, que está siendo restaurado actualmente por le IVCR+i.
Finalmente, el recorrido finaliza con la sección '¿El fin del mapa? La fotografía aérea', dedicada a los fondos de Compañía Española de Trabajos Fotogramétricos Aéreos (CEFTA), formado por 17.600 fotografías aéreas datadas entre 1940 y 1993, un legado de gran utilidad para conocer la evolución y transformación del paisaje y del territorio durante el siglo XX.