“En nuestras propuestas de la Reforma Hipotecaria y del texto refundido de la Ley del Catastro Inmobiliario hemos defendido que la exigencia de una representación gráfica basada en un levantamiento topográfico, fuese una prioridad frente a cualquier inscripción registral o catastral”, afirma el diputado de Iniciativa por Cataluña Verdes y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario de IU, ICV-EUiA, CHA: La Izquierda Plural, Joan Coscubiela.
Según señala el parlamentario al COIGT, Izquierda Plural no ha cuestionado “la necesidad de mejorar los mecanismos y los procesos de solución de los conflictos que existen entre Catastro Inmobiliario y Registro de la Propiedad”. Así expone que esta ley plantea “un mecanismo curioso”: “Si alguien ve una cosa y hace un levantamiento topográfico de eso que observa y entra en conflicto con una inscripción registral, lo que cuenta es esa inscripción registral y no lo que uno ve. Eso se podía haber resuelto con algunas de las propuestas que hizo este grupo, avaladas además por las peticiones del colectivo de topógrafos, en cuanto a que siempre tenga una prioridad y exista ese modus operandi de la exigencia de una representación gráfica basada en un levantamiento topográfico previo a cualquier inscripción, sea registral o catastral. En nuestra opinión, esa es la oportunidad que se ha perdido con la tramitación de esta ley”.
Para Coscubiela, el establecimiento de dicho modus operandi distinto de cara al futuro, “sin duda, hubiera podido permitir evitar contenciosos a largo plazo, ofrecer más oportunidad jurídica y al mismo tiempo, evitar costes a los ciudadanos que, en definitiva, es uno de los objetivos que se dice perseguir por parte de la ley”.
Desde Izquierda Plural plantean este procedimiento en el caso de las inmatriculaciones, es decir, ab initio; supuestos de reordenación urbanística de los terrenos y supuestos en que exista falta de concordancia entre la realidad física y la realidad registral. “Insisto, lejos de suponer un exceso burocrático, eso permitiría dar más garantías jurídicas a los ciudadanos”, matiza Coscubiela.
Cuestionado sobre si el colectivo de profesionales reconocidos legalmente como Topógrafos en el desempeño de sus competencias tenderá a reducir los litigios, Coscubiela responde que “el levantamiento topográfico, sin duda, debería jugar un papel más importante cuando haya conflicto entre el Registro de la Propiedad y el Catastro”, si bien añade que, ante la prevalencia de los registradores, “nos cuestionamos la posibilidad de alcanzar el fin de los litigios que se producen entre ambos organismos”.
El parlamentario catalán considera que con esta Ley “en teoría” se incrementará y valorará más la función de los topógrafos, puesto que “el objetivo del Proyecto de ley es dar seguridad jurídica y reforzar el proceso que estos profesionales desarrollan. Sin embargo, su papel continúa subordinado a la facultad prioritaria de los registradores de la propiedad”.
Coscubiela está convencido de que con la intervención de la figura del Experto Técnico en Topografía se produce “un avance en lo que a eficacia de los procesos de medición se refiere, aportando un rigor técnico que facilitará la resolución de los litigios, o por lo menos, la reducción de los mismos”.